Lóbrega oscuridad
En el destierro de la noche
Silencio en los sonidos
Escucha mi alma
Las penas yacen flotando
En el mar de mis angustias
Melancolía vivida
Esperanzas marchitas
En carruaje ya ido
Se marchan mis ilusiones
La mirada se opaca
Ha perdido su brillo
Desde que te fuiste
Las rosas no dan su fragancia
Los coquiés ya no cantan
Los cocuyos
Apagaron sus luces
Los luceros miran con desconsuelo
La brisa aúlla
Suspiros brotan de mi corazón
Estertores… de un profundo dolor
Miro al cielo
Allí te busco
En la nube que forma tu rostro
Encuentro mi alivio
En el trinar de los pajaritos
Escucho tu voz
En el rocío de la mañana
Percibo tus lágrimas
Fue en una noche...
Una noche paradisíaca
Cuando te ame
Las estrellas brillaban
La luna alumbraba
Te hice mía con devoción
Todo tiene su final…
Todo acaba…
Humo y cenizas
Ausencia y distancia
Un fuego se apaga
Lóbrega soledad
Aferra al alma
La flor de la alegría
No germina
Humo y cenizas quedan
Tan solo humo y cenizas
De lo nuestro
De lo que fue...
Nuestro idilio
Héctor Rafael Montes
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